Padre clama ayuda inminente para salvar la vida de su hija, cuenta Daviplata

Por: Jaime Guzmán

El señor Virgilio Pallares Santiago clama al cuerpo médico, empresarios y fundaciones que se solidaricen y lo ayuden a resolver prontamente la dramática situación de su hija Sandra, una mujer de 42 años que sufre hace más de 10 años del síndrome de Arnold Chiari y ha sido desahuciada por los neurólogos, fisiatras y otorrinos.

“Ella cada día empeora más. Fue operada hace 7 años, pero en la actualidad está muy mal; tiene traqueostomía, pérdida de la audición, parálisis de cuerdas vocales, movimientos mioclónicos, no puede caminar, dependencia total, no puede comer muy bien por su epilepsia y discapacidad total, expresa su padre”

Asimismo, Pallares manifiesta que ha interpuesto una tutela a Sánitas, primero para tratamiento con células madres, sin embargo, se le fue negada porque obedece a algo experimental.

Y una segunda tutela basada en un informe de unos estudios que se le hicieron a su hija en Cuba donde le pidieron unos exámenes en el Centro Internacional de restauración neurológica. “Único en el mundo donde se hace esto y hay una esperanza,” afirma Virgilio Pallares

Sin embargo, para Pallares, el juez en el primer fallo dictamina que la entidad médica Sánitas le está vulnerando sus derechos y debe hacer una junta médica para que valoren el tratamiento de Cuba y si no es viable, entonces que se proponga un tratamiento que sea eficaz y bueno para mejorar a su hija.

Dicha junta se hizo después de 6 meses y cuando contestaron Sánitas comete el delito de fraude procesal al mentir, pues ni siquiera se examinó a la mujer de 42 años y Cuba siendo una potencia solo autoriza unas terapias que alegan se podían hacer aquí en Colombia.

Igualmente hay que señalar que esta entidad médica aseguró que el padre de Sandra, el señor Virgilio Pallares, sí había aceptado el tratamiento, cosa que según él no es verdad y que además no está dispuesto para nada en recibirlo.

Por lo tanto, el magistrado echó para atrás el desacato y finalizar del todo la tutela que había interpuesto Pallares.

En vista de que hay un delito, Pallares interpuso una denuncia penal en la fiscalía por fraude procesal contra Sánitas porque la gerente le mintió al juez.

Además, sí hubo desacato porque Sánitas no cumplió lo que el juez dijo al hacer una junta médica en 30 días y que demoraron 6 meses, habiéndose informado con la abogada Gloria Guzmán todas las fallas, adicionalmente de haber anexado todas las pruebas.

Por eso el padre pide que sea trasladada a Cuba cuanto antes ya que su hija está muy grave pero la denuncia penal se va a alargar mucho y su hija necesita urgentemente un tratamiento; y que implora que ayuden a trasladar a su hija Sandra al país cubano.

Ante lo dramático que está viviendo, él ha recorrido todas las instancias y al fin pudo conseguir que el juez ordenara la junta médica.

Virgilio Pallares pide que no dejen morir a su hija pues tiene derecho a vivir, pero su desesperación es tanta al ver su patología tan compleja que Sandra se ha afectado sicológicamente hasta el punto que su situación tan difícil le ha hecho pensar ya en la eutanasia debido a su estado tan crítico.